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2. Mecanismos y técnicas de apoyo psicológico

Contextualización

¿Recuerdas a Jaime el pequeño que como consecuencia de una caída comenzó a sangrar por la nariz? Pues resulta que ante el estrés provocado por la caída, Jaime te dice que se encuentra mareado y acto seguido comienza a vomitar, este síntoma es una reacción física del estrés.

En este apartado te cuento el resto de reacciones posibles que pueden ser causadas por el estrés, además de darte a conocer técnicas de autocontrol.

¿Cuáles pueden ser las reacciones más comunes ante el estrés?

Las reacciones ante un evento traumático es algo común entre la mayoría de las personas; algunas reacciones pueden ser leves y otras pueden ser fuertes, tanto que puede llegar a ser muy complicado su recuperación.

  • Reacciones físicas: escalofríos, sudor, taquicardia, mareos, vómitos, dificultad para respirar, dolor en el pecho o cualquier cosa que no se considere dentro de un estado de normalidad.
  • Reacciones de pensamiento: problemas en la memoria, confusión, dificultad para concentrarse, desorientación o cualquier para pensar o incluso cambiar su proceso normal del pensamiento.
  • Reacciones emocionales: ansiedad, temor, culpa, ira, pánico, llanto, depresión, negación o cualquier emoción que no sea lo normal de su estado.
  • Reacciones de comportamiento: inquietud, cambios en el sueño, por ejemplo aumento en el consumo de alcohol o otras sustancias, dificultad para expresarse, brotes de ira o cualquier comportamiento que difiera de lo habitual.
  • Reacciones espirituales: pérdida en la fe y la esperanza o cualquier cambio en la espiritualidad personal.

Fases del estrés

Las respuestas de adaptación del organismo al suceso estresante se dividen en tres fases:

  1. Fase de alarma. Es el momento en el que el sujeto reacciona, ante la aparición de un acontecimiento o estímulo estresante.
  2. Fase de resistencia. La situación estresante se alarga en el tiempo sin haber podido eliminar la fuente de estrés; el orgnismo no consigue recuperarse y las fuerzas comienzan a decrecer, evolucionando si no se soluciona a la tercera fase.
  3. Fase de agotamiento. Si no se consigue acabar con la situación, se van consumiendo los recursos, apareciendo el agotamiento y la frustación, apareciendo alteraciones psicosomáticas.

Técnicas de autocontrol ante el estrés

1. Controle la respiración y relajación para controlar las respuestas fisiológicas.
2. Etiqueta la situación como un reto que nos motive en la búsqueda de soluciones y no como una amenaza que nos produce miedo y conductas de evitación.
3. Afrontar y plantar cara a la situación.
4. Saber estar en el presente, no perderse en los errores cometidos en el pasado.
5. Compartir los problemas.
6. Evitar demasiada implicación.
7. Autoreforzarse ante los logros que hemos conseguido.